Indague cuál es la causa que lo mueve a escribir; examine si ella expande sus raíces en lo más profundo de su corazón. Confiésese a usted mismo si moriría, en el supuesto caso de que le fuera vedado escribir. Ante todo, pregúntese en la más silente hora de la noche: "¿Debo escribir?" Hurgue dentro de sí en procura de una profunda respuesta y, si esta resulta afirmativa, si puede afrontar tan serio interrogante con un fuerte y simple "debo", entonces construya su vida según esta necesidad Su vida, hasta en los más vacíos e insignificantes momentos debe convertirse en señal y testimonio de este impulso.
Rilke.
1 comentario:
Sí. Yo sé que debo escribir, porque cuando escribo me siento más libre... Y también me parece bien escribir cuando tenga algo para decir... algo que emocione, si no ,no vale la pena escribir. Yo escribo para emocionar y para dar a conocer una visión del mundo, la mía, por supuesto...
Publicar un comentario